La programación es más que codificar, es una habilidad que abre la puerta a un mundo de posibilidades. Enseñar esta habilidad a los niños no solo los prepara para las profesiones del futuro, sino que también les brinda una ventaja significativa en su desarrollo personal.
Descubramos juntos por qué la programación es beneficiosa para nuestros niños tanto en los aspectos cognitivo, práctico y psicosocial. Y luego se explicará como empezar a enseñar la programación a los niños.
Beneficios cognitivos de aprender programación
El aprendizaje de programación puede ser un fuerte estímulo para el desarrollo cognitivo de los niños, algo respaldado por un meta-análisis realizado por Liao y Bright (1991) en la revista Journal of Educational Computing Research. Este análisis reveló que la mayoría de los estudios (89%) mostraron efectos positivos de la programación en los resultados cognitivos, lo que sugiere un impacto considerable en las habilidades cognitivas de los niños.
Desarrollo de pensamiento lógico y matemático
La necesidad de comprender la secuencia, establecer condiciones y predecir resultados, fortalece sus habilidades esenciales en matemáticas y lógica. El meta-análisis de Liao y Bright descubrió que los estudiantes con experiencia en programación tenían puntuaciones más altas en diversas pruebas de habilidad cognitiva, alrededor de dieciséis puntos percentiles más altos que los estudiantes sin experiencia en programación.
Promueve el pensamiento crítico y la resolución de problemas
A medida que los niños programan y encuentran errores, deben pensar de manera crítica para resolverlos, probando diferentes soluciones y aprendiendo de sus errores. Estos hallazgos respaldan la idea de que la programación puede ser una herramienta eficaz para enseñar habilidades de resolución de problemas.
Fomenta la creatividad
Los niños pueden usar la programación para crear juegos, animaciones y aplicaciones propias. Este proceso creativo puede estimular su imaginación y alentar el pensamiento creativo. Según los hallazgos de Liao y Bright, los beneficios del aprendizaje de la programación van más allá del contenido específico de un lenguaje de programación particular, lo que implica un impacto significativo en las habilidades cognitivas generales.
Desarrolla funciones ejecutivas de los niños
El aprendizaje de programación tiene un impacto comprobado en el desarrollo de las funciones ejecutivas de los niños, una habilidad cognitiva crucial para la planificación, atención y control del comportamiento. Este hallazgo proviene de dos estudios realizados por Arfé, Vardanega, Montuori y Lavanga en 2019.
Estos estudios, publicados en Frontiers in Psychology, exploraron los efectos del pensamiento computacional y la codificación en el desarrollo de las funciones ejecutivas en niños de escuela primaria. Arfé y sus colegas compararon los efectos de un mes de actividades de codificación con las actividades estándar de STEM en grupos de control. Los resultados mostraron que los niños expuestos a la codificación mejoraron significativamente más en las tareas de planificación e inhibición que los niños en los grupos de control.
De manera concluyente, los hallazgos de Arfé y sus colegas (2019) respaldan la afirmación de que el aprendizaje de programación puede potenciar el desarrollo espontáneo de las funciones ejecutivas en los niños.
Beneficios prácticos de aprender programación
La programación puede preparar a los niños para una amplia variedad de trabajos futuros. Según el informe “The Future of Jobs” del Foro Económico Mundial, se espera que las habilidades en programación y tecnología sean cada vez más demandadas en el futuro.
Además de los trabajos, la programación también puede permitir a los niños crear sus propios proyectos. Pueden crear aplicaciones, sitios web, juegos o cualquier cosa que puedan imaginar. Esto puede darles un sentido de logro y motivación para seguir aprendiendo.
Finalmente, aprender a programar puede ayudar a los niños a interactuar con la tecnología de una manera más productiva. En lugar de ser solo consumidores de tecnología, pueden ser creadores. Esto puede darles una mayor comprensión y control sobre el mundo digital en el que viven.
Beneficios psicosociales de aprender programación
Aprender a programar también puede tener beneficios psicosociales significativos. La programación puede ayudar a los niños a desarrollar su autoestima y confianza. Cuando logran crear algo con la programación, pueden sentirse orgullosos de sus logros. Un estudio de la Universidad de California en Berkeley (2017) encontró que los niños que aprenden a programar a menudo muestran un aumento en la confianza en sí mismos.
La programación también puede ser una actividad social que fomente el trabajo en equipo y las habilidades de comunicación. Muchos proyectos de programación requieren trabajar en equipo, lo que puede ayudar a los niños a aprender a colaborar y comunicarse efectivamente.
Otros beneficios que se desarrollan al aprender a programar
Esta es una lista de otros beneficios de enseñar programación a los niños:
- Inculca la disciplina y la paciencia: La programación requiere un enfoque detallado y el seguimiento de instrucciones precisas. Los niños aprenden a ser pacientes y metódicos, lo que puede beneficiar a otras áreas de su vida.
- Fomenta la autonomía: A través de la programación, los niños pueden ser autores de su propio aprendizaje, creando y modificando su código. Este sentido de autonomía puede ayudarles a sentirse más empoderados y seguros.
- Mejora la concentración: El proceso de programación requiere un alto nivel de concentración. Los niños que practican programación pueden desarrollar una mayor capacidad para concentrarse durante períodos prolongados.
- Promueve el pensamiento orientado a detalles: La programación es una disciplina que requiere precisión. Un pequeño error puede causar un problema en el código. Este enfoque en los detalles puede ayudar a los niños a ser más cuidadosos y precisos en su trabajo.
- Desarrolla habilidades de gestión del tiempo: Los proyectos de programación a menudo tienen plazos que deben cumplirse. Esto puede ayudar a los niños a desarrollar habilidades de gestión del tiempo, planificación y organización.
- Ofrece una forma de expresión personal: Al igual que el arte o la música, la programación puede ser una forma de expresión personal. Los niños pueden usar la programación para crear proyectos que reflejen sus intereses y personalidades.
- Fomenta el aprendizaje continuo: La programación es un campo en constante evolución. Los niños que aprenden a programar pueden desarrollar una mentalidad de aprendizaje continuo, buscando siempre mejorar y actualizarse.
Cómo empezar a enseñar programación a los niños
Empezar a enseñar programación a los niños puede ser un desafío, pero es posible con los pasos y recursos correctos:
- Edad Adecuada: Puedes comenzar a introducir conceptos de programación a los niños tan pronto como estén listos para aprender. A partir de los 5 años, los niños pueden empezar a aprender conceptos de programación con juguetes y juegos educativos.
- Herramientas y Recursos: Utiliza plataformas de programación amigables para niños como Scratch o Blockly. Estos recursos utilizan bloques de programación visuales para ayudar a los niños a aprender los conceptos básicos de programación de una manera divertida y atractiva.
- Aprendizaje Lúdico: Haz que el aprendizaje sea divertido. Los niños aprenden mejor cuando están interesados y comprometidos. Puedes usar juegos, proyectos y desafíos para hacer que el aprendizaje de la programación sea atractivo.
- Aprender Juntos: Si no tienes experiencia en programación, puedes aprender junto con tu hijo. Existen numerosos recursos en línea gratuitos para aprender a programar, que pueden ser utilizados tanto por niños como por adultos.
- Establecer Metas: Establece metas y desafíos pequeños para mantener a los niños motivados. El logro de estos pequeños hitos puede ayudarles a ver su progreso y mantener su interés en el aprendizaje.
- Apoyo Continuo: Ofrece apoyo y aliento constante. Los niños pueden frustrarse si algo no funciona como esperaban. Ayuda a tu hijo a entender que los errores son parte del proceso de aprendizaje.